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Ángel Villacampa llegó este verano para comandar el vuelo del América Femenil a partir del Apertura 2022.

“Tenía muchas ganas de llegar, todo es a mucha velocidad. Conocer mejor a la plantilla desde dentro… la verdad es que todo se tapa con la ilusión que tenemos de conseguir esta nueva temporada. Después de haber conseguido títulos en España y haber hecho cosas importantes, como entrenador siempre se necesita buscar esos retos que te extramotivan, el América es un club inmenso, muy grande que me permite seguir focalizando en esa búsqueda de encontrar esos títulos, en esa mejora como entrenador, y en esa búsqueda de éxito futuro. Buscaba un proyecto ambicioso que de alguna manera me pusiera otra vez en esa línea que logramos en el Atlético de Madrid.”

Cuando llegas a un equipo tan grande no se puede pensar en pequeño, hay que ser ambicioso, hay que ser exigente, hacer que cada balón cuente y que cada entrenamiento sume y que nos vaya acercando a los objetivos.

El análisis que hicimos antes de llegar aquí, sí que he ido identificando que a veces puedes quedar primero en torneo regular y en la liguilla no significa nada, pero en esa fase regular te tiene que dar la posibilidad de hacer una mejor liguilla. Estar preparado en muchas situaciones, incluso creo que hasta el factor suerte puede ser un gran factor, en cuanto a lesiones y otros elementos fuera de lo deportivo. El torneo regular es el que te tiene que dar esa identidad.

La pretención que tenemos es que queremos ser un equipo intenso, protagonista, que golpeemos mucho y nos golpeen poco, que seamos un equipo que tengamos una seña de identidad que el aficionado americanista se sienta identificado y orgulloso, porque no puede ser de otra manera.

Me he encontrado con una plantilla con muchas ganas, muy comprometida, con muchas ganas de mejorar y hacer cosas importantes.

Hemos sentido mucho cariño por parte de la afición, y queremos devolver ese cariño y esa confianza con trabajo y ojalá que con títulos y éxitos.”